Beneficios de una casa pasiva.

   Cada vez está más presente en nuestro día a día el concepto de casa pasiva, puede que todavía no con esos términos, pero seguro que, si os digo eficiencia energética, ahorro y confort, sí sabéis de lo que hablo.

Muchos nos preguntáis por qué, ¿qué beneficios tiene una casa pasiva?, veámoslos.

Viviendas sostenibles

   La mejor cualidad de las casas pasivas, o passivhaus en alemán, es que son sostenibles, esto es, son viviendas que garantizan el equilibrio entre el bienestar de las personas, el cuidado del medio ambiente y el crecimiento económico. 

Beneficio social

Uno de los pilares fundamentales de los edificios pasivos son las personas. Son viviendas diseñadas para garantizar el bienestar a sus habitantes. Este bienestar se consigue gracias a unas buenas condiciones de salud y confort interior.

   Los niveles de aislamiento, las altas prestaciones de las carpinterías y la estanqueidad de la envolvente facilitan, por un lado, que la temperatura del interior de la vivienda se mantenga estable durante todo el año, oscilando entre 20-25°C, y permiten, por otro lado, que los niveles de ruido del exterior se reduzcan prácticamente en su totalidad en el interior de la vivienda.   

   La ventilación mecánica permite filtrar el aire antes de introducirlo a la vivienda, lo que garantiza que el aire que respiramos sea de buena calidad. La sensación que se experimenta al habitar en estas casas es la de respirar en un ambiente limpio, poco cargado y agradable.

Beneficio económico

  Hasta ahora ha sido una de las características más valoradas.

La calidad constructiva de las casas pasivas supone un ahorro del consumo de energía de alrededor del 75%.

    Teniendo en cuenta que el coste de construcción de estos edificios no es muy superior a las construcciones no pasivas, las viviendas pasivas ofrecen un ahorro energético que se traduce en un ahorro económico considerable a medio y largo plazo.

Beneficio ambiental

   Cada vez somos más conscientes de la importancia que tiene la huella que dejamos en el planeta, por eso este, es cada vez más, un aspecto decisivo a la hora de decantarse por una vivienda pasiva.

    El ahorro del consumo de energía que veíamos en el punto anterior se traduce en una disminución de las emisiones de gases contaminantes a la atmósfera. Por esto, las viviendas pasivas apenas emiten contaminantes a la atmósfera lo que minimiza el impacto que generamos en el medio ambiente.

SALUD Y CONFORT + AHORRO + MEDIO AMBIENTE

Conclusión

       Con lo que hemos visto hasta ahora podemos decir que las viviendas pasivas son viables, equitativas y ecológicas. Son casas que mejoran nuestra calidad de vida y nos permiten vivir el presente sin comprometer las necesidades futuras. 

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